Hoy en día el cine, sobre todo el americano, padece una dolencia generalizada y preocupante: la falta de ideas. La originalidad parece haberse ido de vacaciones y remakes, segundas, terceras o más partes, secuelas, precuelas, reediciones y demás llenan continuamente nuestras pantallas.

Entre este oscuro mundo de cosas repetidas y ya vistas se abre paso una película como la que ahora nos ocupa, distinta a cualquier otra y llevada a cabo con maestría tanto por el director como por el plantel de actores que la interpretan.

La historia trata de un titiritero harto de su mujer que tiene la casa llena de animales. Tiene que buscar un trabajo y lo encuentra como archivero en el piso 7 y medio (tronchante) de un edificio en una compañía llamada Lestercorp. Allí se enamora de una compañera y encuentra un extraño pasadizo que lleva a la mente de John Malkovich durante 15 minutos y te deja luego en una cuneta de Nueva Jersey. Estos hechos cambiarán su monótona vida de la que sólo se evadía inventando historias con sus marionetas.

En esta película todo se califica de extraño y no se acaba de explicar bien porqué existe ese túnel, ni falta que hace, porque lo haría más aburrida y no más creíble.

Dirige Spike Jonze, un debutante con amplia experiencia como realizador de videos musicales y anuncios. Tiene mérito atreverse a hacer de este su primer trabajo. El ocurrente guión es de Charlie Kauffman quien pese a su experiencia en ese campo debuta también en la producción, con la compañía Good Machine que comparte con Jonze. Después de esto Adaptation ha sido su siguiente trabajo.

Personalmente adoro a la familia Cusack en cualquiera de sus apariciones, pero John C. en este papel está genial, con uno de esos personajes que él tan bien sabe hacer, que se deja llevar por el ritmo de lo que sucede a su alrededor sin poder hacer nada.

Poco antes de ver esta película vi “Algo pasa con Mary”. En ella se pudo ver a Cameron Díaz como mujer atractiva y deseada por todos. En esta destaca mucho más como actriz. Físicamente está hecha una piltrafa y demuestra que no es sólo una cara bonita con un cuerpo de infarto, ya que no hace uso de ninguna de las dos cosas, que tenerlas, la tiene. Hace una buena interpretación, pero aún está por darnos lo mejor.

Posiblemente la que más juego da del selecto grupo de actores es Katheleen Keener, algo que quedó reflejado en su nominación al oscar (¿¿??) que al final no se llevó. Ese estilo de vecinita cachonda, deseable y provocativa lo tiene logradísimo.

Otros actores son Orson Bean, el jefe de Cusack que tiene una extraña relación con él y con su esposa, y es un tipo despistado y viejo que esconde un oscuro secreto. Este actor también se ha dedicado a hacer de todo en TV, teatro y cine interpretando y dirigiendo. También es escritor e incluso puso su voz para la versión animada de El Señor de los Anillos y El Hobbitt. Interpretando a su secretaria sorda está Mary Kay Place, que además de actuar también se ha reconvertido en directora. Suyos son algunos episodios de series de televisión como Sigue soñando y Friends entre otros. También hay unos cuantos cameos de actores famosos como Sean Penn, Winona Ryder o Brad Pitt entre otros. Charlie Sheen hace de sí mismo en un papel un poco más extenso pero muy autoparódico. Se hacen otras referencias a Gary Sinise, Michelle Pfeiffer, Dustin Hoffman y otros.

Y dejo para el final el que más mérito tiene. Hay que quitarse el sombrero una vez más ante John Malkovic. Es un hombre que nos tiene acostumbrados a los papeles más variados e interpretaciones soberbias y llenas de fuerza y carácter, pero aquí además se ríe de si mismo, algo que no todas las estrellas de Hollywood hacen (para que engañarnos, casi ninguna). Se interpreta auto parodiándose y hay una escena antológica de la que él es el único protagonista.

Aparte de esa paradójica escena en que Malkovich se mete en Malkovich hay otra en la que Craig lo usa como marioneta que es también muy buena y además de vernos dentro de su mente también nos introducimos en la del mono que Cameron Díaz tiene como mascota. Como archivan los dedos del protagonista o su truco para adivinar el nombre de la chica te hacen también soltar la risa tonta.

Hay mucha simbología dentro de la historia, como las marionetas o el túnel que lleva a Malkovich, que es, como dice Cameron Díaz la vagina de Malkovich por la que se accede a una nueva vida.

¡Yo también quiero ser John Malkovic!